PARA LA FLACA:

A Sandra alababa mas nada hallaba. Jamás sabrá, la amaba.

Alta, alargada, cabalgaba tras la manada. La daga traspasa la garganta, sangrada. Arrastrada al mar la tan pasmada alma. Allá va Sandra. Calla la palabra, cada mañana.

La flaca, la maga. Bastaba amar.

Planta maltratada, pájara atada. Allá van las amarras, amargas. Brama calmada. Avanzas, palpas la nada. Sangras, bajas la arma, cargas la rama ¡caramba! 

Harta. Parada.

Falta cantar, danzar. Salva las almas. 

Ardan, ardan las amarras. Avanza, Sandra. Mata fantasmas, ya basta. Ama, abraza las palabras, saca las alas alargadas. Atrapa las mañanas, canta.

Saladas las manadas, falsas las alabanzas. Trampas.

Manda a la nada las caras largas. Taladra la calma, la nada. Flaca: arrastra la maldad. Blancas  baladas, gana las batallas.

Lagañas amargas. Bancas fracasadas.

Maga: brama, hallarás paz. Alcanza la calma. Saca las garras, las carcajadas.  Das la talla, saca las campanas. Andarás ancha, vasta.

Malvadas navajas. Granadas. Arañas.

Acá, allá, la palabra más amada: Sandra.